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Silvio Fischbein. Últimos trabajos

Silvio Fischbein. Últimos trabajos

Silvio Fischbein

Del 29 de Julio al 28 de Agosto de 2011 - Inaugura: 19hs  - Entrada: libre y gratuita

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¿Pintura sin pintura? Es una pregunta que Luis Felipe Noé propuso en los últimos años para ampliar nuestra comprensión del arte. Su idea sugiere entender la pintura como el arte de la imagen o la articulación armónica entre partículas de color. Si continuamos con este argumento, ¿por qué no podríamos pensar entonces que las obras de Silvio Fischbein funcionan cómodamente como pinturas que nos dejan evocar, por ejemplo, vibrantes cartografías urbanas sin que intervengan nunca ni el pincel, ni la espátula? ¿acaso la radical presencia del color que vemos en sus trabajos no es un elemento constitutivo de la práctica pictórica?

 

En ese sentido, basta observar sus últimos trabajos para advertir cómo la técnica de ensamblaje con resina epoxy que actualmente usa acentúa la saturación de los colores otorgándole un carácter más pictórico a sus obras.   Al mismo tiempo, este avance del artista en la experimentación de las técnicas es una opción que inscribe su obra dentro del proceso de deslimitación propio del arte contemporáneo ya que trabaja por fuera de la ortodoxia del arte moderno al no seguir el mandato de la pureza del medio que definía a la pintura. Por el contrario, en base a lo que intuye Arthur Danto , su obra queda imbricada en ese “final de lo puro” que el teórico vislumbraba como una de las matrices del arte contemporáneo. Su práctica artística deja de lado toda convención, lo que le permite expandir la esfera de lo pictórico hacia el territorio del objeto real, mostrando que el color puede ser intensamente expresivo prescindiendo por completo del acrílico, del óleo, la acuarela o cualquiera de las técnicas definidas por la tradición.  

 

En otro orden, Fischbein nos propone ahora una vía alternativa al dominio de la concepción constructivista que imperaba en sus obras ya que abandona tanto el marco que encerraba sus piezas como el concepto ortogonal que regía sus composiciones. Aparecen así formas de índole más libre, con bordes redondeados que surgen de modo azaroso por el chorreado de la resina que derrama para resolver los soportes de sus estructuras. Estas nuevas formas parecen deducirse del mismo espíritu lúdico que Fischbein promovía en sus obras iniciales al manipular artesanalmente pequeños objetos del mundo infantil para asignarles un estatuto artístico en el nuevo contexto de lo artístico. Aquí, el rigor de las geometrías propuestas por las abstracciones más clásicas deja paso a versiones más experimentales. El uso de materiales industriales como el plexiglás le permite investigar en forma desprejuiciada sobre los efectos de las transparencias en términos de luz y de color, mientras que la decisión de abandonar el marco optando por emplazamientos que tanto pueden ser paredes como plataformas induce a ampliar los puntos de vista para expandir el universo perceptivo del espectador.

 

No convendría tampoco pasar por alto el antecedente de la estética de la acumulación practicada por ciertos referentes de los nuevos realismos, donde el objeto adquiere un valor estético de relevancia. De este modo, aparecen ensamblajes donde la multiplicación de figuras genera una sensación de horror vacui que el artista pareciera querer neutralizar con el hábil manejo del color y con un estudiado ordenamiento espacial -incluso también en las obras más recientes- donde su oficio de arquitecto aflora aun sin que se lo proponga.  

 

Al mismo tiempo, proximidad y distanciamiento podrían ser dos vectores que regulan las estrategias representativas de Silvio Fischbein en su manipulación del objeto y de la realidad. En el primer caso, la proximidad queda establecida por la familiaridad que existe entre los espectadores y los objetos que el artista selecciona. A veces se trata de muñequitos de cotillón otras, de los tan consumidos kinder/sorpresa, tornillos, cintas fílmicas, tubos de pintura, ruleros, objetos que configuran una suerte de “gabinete de curiosidades”, sin el status signado en el siglo XVII aunque con el mismo espíritu del coleccionismo obsesivo, donde conviven elementos que podemos ver en una ferretería, en cualquier kiosko o en el baúl de una habitación infantil, lo que facilita la relación cómplice entre la obra y su público. En paralelo, la descontextualización de estos objetos de su ambiente cotidiano y su inédita inclusión en la esfera de lo artístico genera una sensación de sorpresa y extrañamiento que problematiza su sentido originario. Se trata de una invención de lo cotidiano que estimula la relación entre el arte y la vida y donde no es difícil deducir un gesto que pareciera ser, de algún modo, deudor de las prácticas dadaístas al valorar el libre vínculo con objetos de la vida diaria.

 

De esta suerte, las imágenes se integran en una original narrativa cuya interpretación se multiplica en un juego sugestivo de tramas y texturas en permanente estado de ambigüedad.

 

Malena Babino - UBA
febrero de 2011

TEXTO DEL ARTISTA

 

“Yo creo que hay cosas que por más que uno las hable, no diría que son vacías pero no suplen el hecho de la relación directa con la obra, porque una obra no se cuenta, me gustaría que la gente venga y que la vea”, es la frase con la que inicia la charla con Diagonales el artista Silvio Fischbein y parece, por lo que él mismo dice, que la cosa va a quedar ahí…

 

Pero las obras que reunió para exponer en las salas 4 y 5 del MACLA (50 e/ 7 y 8, Pasaje Dardo Rocha) bajo el título de Fragmentos urbanos (y que se podrán ver hoy a partir de las 19, cuando quede inaugurada la muestra) ameritan algunas palabras más del autor, que dio algunos detalles de sus creaciones, empezando con el hecho de que la exhibición refleja “unos cuantos años de trabajo”.

 

En su visita anterior a la ciudad, allá por el 2009, Fischbein trajo a la galería de Pisouno Arte su producción “de ese momento” y ahora presenta trabajos desde esa época hasta esta parte: “no sé si la palabra es continuación, pero este es el trabajo posterior a aquella muestra”, aclaró el artista plástico, que también es arquitecto y cineasta.
–Entonces ¿de qué se trata Fragmentos urbanos?
–Responde a mis preguntas acerca de la realidad, es una mirada mía acerca de la realidad, atravesada por mis preguntas, a donde yo creo que cuestiono el tema de la multitud, la urbanidad, la aglomeración, cosas que a mí me preocupan desde hace mucho tiempo. De hecho, mi formación se la debo a mi carrera de arquitectura y urbanismo, por eso el título de la muestra es Fragmentos urbanos y lo que yo aspiro es que por un lado se produzca un estado de emoción por parte del espectador y al mismo tiempo que también a través de esa mirada él se pueda hacer sus propias preguntas acerca de la obra. Es eso, yo estoy convencido de que si uno pudiera poner en palabras su obra, no haría la obra.
–¿Y cómo hace cada una de sus obras? ¿Primero las piensa y las lleva adelante o las va realizando a medida que le surge la idea?
–Yo boceto, lo cual no significa que el boceto sea una cuestión rígida y que no se vaya transformando con el tiempo. Yo creo que en el arte no hay nada que quede congelado, es algo que se está transformando permanentemente. Yo hago bocetos y maquetas, pero eso no significa que después en la obra no se vayan produciendo modificaciones.

 

Continuando con el tema de la realización de cada una de sus piezas, Silvio Fischbein reveló que siempre anda con su “cuaderno de apuntes”. Lo saca de su bolso y muestra como era la idea original y como quedó el trabajo final: “este es el boceto, quedó la misma idea pero no es exactamente igual. Yo siempre voy bocetando cosas que voy a hacer en el futuro, pero son cosas que en el momento de la realización también se van modificando. Yo no creo en que la obra terminada implique solamente una reproducción del boceto en el tamaño natural y con los materiales, sino que está en permanente desarrollo”.
Búsqueda. Ninguna de las obras tiene, por separado, título: “no les pongo nombre a cada una de las realizaciones, es un conjunto que denominé Fragmentos urbanos o también se podría llamar la celebración del juguete”, especificó Fischbein, y su aclaración sirvió como disparador para otro tema que el artista no quiso pasar por alto: la búsqueda de materiales.

 

Juguetes, ruleros, frascos, jaulas, tubos, durlock, espejos y resina son algunas de las cosas que se podrán encontrar en los trabajos expuestos en el MACLA: “no son materiales tradicionales, hay una búsqueda permanente de nuevos materiales con los cuales trabajar. Por ejemplo, una vez un coleccionista me regaló mil Kinder Sorpresa y me llevó un largo tiempo pensar que iba a hacer con ellos, pero finalmente los pude utilizar”.
Junto a los materiales, el color ocupa un papel fundamental en sus creaciones: “y dicen que no soy minimalista”, bromeó Fischbein, que nuevamente invitó a los platenses a recorrer su exposición, que permanecerá abierta hasta el 28 de agosto.

 

Para adentrarse un poco más en esta exhibición, bien se podrían citar las palabras de las curadoras, Malena Babino y Graciela Sartis, que en el catálogo de la muestra se preguntan: “¿Pintura sin pintura? Es una pregunta que Luis Felipe Noé propuso en los últimos años para ampliar nuestra comprensión del arte. Su idea sugiere entender la pintura como el arte de la imagen o la articulación armónica entre partículas de color. Si continuamos con este argumento, ¿por qué no podríamos pensar entonces que las obras de Silvio Fischbein funcionan cómodamente como pinturas que nos dejan evocar, por ejemplo, vibrantes cartografías urbanas sin que intervengan nunca ni el pincel, ni la espátula?”

 

Él, por su parte, prefirió señalar: “A mí me produce mucho placer hacer estas obras, pero me produce mucho más placer cuando la gente la mira y se cuestiona cosas, o se emociona, o las rechaza o se enoja, que pase lo que pase, pero que les pase”. Y reiteró su invitación: “me gustaría que vengan y que la vean, tanto de parte mía como de parte del Museo, porque es un trabajo muy grande traer esta y cada una de las muestras que se exponen acá”.

 

Publicado en diario Diagonales

28.07.2011

 

ARTISTAS PARTICIPANTES

 
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