Grabadora, pintora, ilustradora, ceramista y docente, Aída Carballo nació en Buenos Aires en el año 1916, egresó de la Escuela de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón en 1937, estudió dibujo con Pío Collivadino y continuó su formación en la Escuela Superior de Bellas Artes Ernesto de la Cárcova.
Recibe su primer premio en el año 1948 y a partir de ese momento inicia su conquista de reconocimientos artísticos tanto en el país como en el exterior. En 1964 recibe el Gran Premio de Honor, en el Salón Nacional de Artes Plásticas, en el año 1977 la Academia Nacional de Bellas Artes le concede el premio Facio Hebequer y en el año 1982 es distinguida con el Premio Konex, al mérito en Grabado. Fallece en Buenos Aires en el mes de abril de 1985.
Grabados, dibujos, ilustraciones, conforman esta muestra permitiéndonos conocer las múltiples facetas creativas de esta artista.
Convencidos de la importancia de la figura de Aída Carballo para las artes visuales argentinas, esta muestra constituye un homenaje a su actividad. Expresionista, retratista de lo cotidiano, Aída Carballo, alternó su producción artística con periodos de internación siquiátrica. Carballo es, también, una de las figuras más recordadas por su docencia en las escuelas de Bellas Artes.
Pensar la obra de Aída Carballo es percibir la pasión, la sensibilidad, la melancolía, la entrega y el amor, tanto en la realidad y lo cotidiano, como también en lo onírico y lo mágico.
La artista lo explicó de esta manera: “Yo creo tener dos fuentes de inspiración […] Una muy irracional, sumergida en una zona inconsciente, sutil. Y la otra el entorno. Yo extraigo la anécdota de los aconteceres cotidianos: del colectivo repleto, de la calle, de los patios, de los vecinos, así como viene de afuera yo lo recibo y lo asocio a aquella sensación interior. Así hago que confluyan ambos ríos.